Etapa 3: Vigo – Caldas de Reis

VIGO: Vigo se encuentra en el corazón de las Rías Bajas. Como parajes naturales se encuentran las Islas Cíes a la entrada de la Ría y pueden visitarse, cuenta con interesantes playas; la Ría es muy importante social y económicamente para la ciudad.

Como es habitual quedamos para iniciar la etapa a las 8 de la mañana. Hoy ha amanecido con mucha bruma y mientras aclara el tiempo aprovechamos para desayunar. La etapa la iniciamos desde el DINOSETO, jardín con dos arbustos tallados en forma de dinosaurio, uno de ellos grande y que le acompaña una cría más pequeña.

Cerca, en la Porta do Sol se encuentra la escultura denominada popularmente EL SIRENO, hombre pez símbolo importante para Vigo.

La salida es un tramo de bajada con bastante tráfico en dirección hacia la estación de ferrocarril. Con la vista puesta en la estación cruzamos un par de rotondas y vamos adentrándonos en el Puerto para tomar la carretera PO-323 que en su inicio se corresponde con la calle de Sanjurjo Badia, callejeamos en ascenso por los arrabales de la ciudad. Llegamos a las inmediaciones del Puente de Rande que une las dos orillas de la Ría.

Desde la zona alta de Vigo, disfrutamos de las bonitas vistas de la Ría, de la ciudad, Islas Cíes, Puente de Rande y la Ensenada de San Simón salpicada de infinidad de bateas para la cría y cultivo del mejillón y otros moluscos.

A través de un puente elevado cruzamos la AP-9 y accedemos al Camiño das Laxes, combinamos caminos de tierra y asfalto en ascenso. Algunos de los repechos con hasta un 21%.

Terminado este camino continuamos por el Camiño da Fenteira, que lejos de aliviar nuestra calvario inicial, nos sorprende de pronto  con una ascenso de un par de kilómetros. No queda más remedio que poner los pies en tierra para evitar males mayores.

Una fuente de agua, es  excusa muy ideal para hacer una parada y entretenernos un poco más de la cuenta sujetando alforjas, etc.

La verdad es que ha sido un inicio de etapa fuerte y estamos todos un  poco tocados ya, y aún es demasiado pronto para ello. De Nuevo disfrutamos de las vistas de la Ensenada de San Simón.

Descendemos ahora por una agradable pista forestal repoblada con robles, castaños y acacias hasta llegar a la Iglesia de San André de Cedeira.  Circulamos ahora con  cierta rapidez entre árboles y casas dispersas por el Camiño das Cardosas hasta la N-550. Los alrededores de REDONDELA  son un poco caóticos, pues de pronto nos nos vemos inmersos en un nudo de carreteras y línea de ferrocarril.

Bajamos hasta la rotonda por el Pazo de Vilavella y conectamos con el Camino Central Portugués que se adentra en la población de Redondela. Tenemos intención de dirigirnos al alberge y se encuentra cerrado. Sellamos las credenciales en la Oficina de Turismo situada al final de una estrecha calle.

Observamos bastante movimiento de peregrinos. Paseamos por las calles peatonales y nos acercamos  a la Iglesia de Santiago de Redondela en cuyos alrededores se concentran un buen número de peregrinos. Por su situación en un paraje natural de gran belleza es de un gran atractivo para los visitantes.

Por la Rúa do Cruceiro salimos de la población cruzando a la N-550. Al pasar el Río (Rego) Pexegueiro, subimos por la Rúa de Torre  Calle exigente rampa que pasa sobre la vía férrea para  buscar el Camino Real de Cesantes y Tuimil; y dirigirnos hacia la sierra.

En una tapia de una zona de descanso, los peregrinos van depositando conchas de vieira, por lo que hay centenares. Representaban la culminación del Camino de Santiago de los peregrinos.

A partir de aquí y en descendemos hacia la N-550 para acceder la localidad de ARCADE.

Por el interior nos dirigimos a Arcade cruzando el puente San Paio sobre el Río Verdugo. El puente conmemora la batalla que tuvo lugar en la Guerra de la Independencia contra las tropas Napoleónicas. Construido entre los siglos X y XI, sobre un antiguo trazado romano.

El pueblo es pintoresco, recorremos sus calles y tomamos sucesivas e incómodas rampas.

Deseamos  salir de nuevo a la carretera, cruzarla y comenzar a circular por pistas y sendas.

Cruzamos el Río Ullò por una pasarela de acero y hormigón montados sobre el puente medieval.  Al otro lado del puente tenemos que circular y caminar por una calzada romana y medieval

(Brea Vella da Canicouva), empedrada con profundas marcas de rodaduras en las losas graníticas a través de un bosque de robles y eucaliptos. La vereda es realmente incomoda para ciclistas.

Se trata de la Vía Augusta XIX de  BRAGA a ASTORGA descrita en el itinerario de Antonino.

Esta zona entre Rías es bastante montañosa, circulamos por pistas y caminos rurales con bastantes cuestas  que a esta altura de etapa se dejan sentir en las piernas.

En la última cuesta antes de descender a la vertiente de la Ría de Pontevedra y en la misma cima hay aparcado un camión bar. Tomamos  cerveza y algún pincho para recuperarnos. Estos del camión-bar, son listos.

El descenso se hace agradable, pasamos por la humilde capilla de Santa Marta de Ganderón en el valle de Tomeza.

Podemos elegir dos opciones para llegar a Pontevedra: una es seguir por la carretera EP-0002  con algo de trafico y que nos lleva directamente a Pontevedra y la otra opción es necesario girar a la izquierda para adentrarse por las sinuosas sendas del Río Tomeza evitando el tráfico y el estrés y que supone algún kilómetro más. Optamos por continuar por asfalto EP-0002 con tráfico. Comeremos  junto al alberge público en la misma entrada de Pontevedra.

Sellamos nuestras credenciales y tomar un típico menú de peregrino. La etapa está siendo dura y hemos invertido demasiado tiempo,  vamos mal de horario para terminar la etapa prevista hoy. Sin descansar demasiado reemprendemos la marcha.

Siguiendo las marcas del Camino llegamos al Santuario de la VIRGEN PEREGRINA en pleno casco Antiguo.  Monumento  construido en forma de concha. Hacemos las fotos de rigor y seguimos callejeando hasta llegar al Río Lerez  cerca de la zona donde confluye con la Ría de Pontevedra.

Tras cruzar el Río Lerez por un moderno puente con pasarela y carril bici, tomamos la ribera del Río Gandara hasta Pontecabras.

Cruzamos la vía férrea y durante varios kilómetros compartimos la PO- 531 que lleva tráfico intenso.

De nuevo vuelve a repetirse  lo que ya viene siendo habitual hoy, insistentes rampas,  pistas boscosas de robles y eucaliptos con abundante sotobosque.

Atravesamos los concellos de A CANCELA y BRIALLOS.

Debido a que se nos está haciendo tarde por lo avanzado de la hora, tomamos la decisión de que los más fuertes del grupo se adelanten a buscar alojamiento para pasar la noche. Llegar a Padrón era nuestra meta hoy pero no es posible.

Encontramos alojamiento en CALDAS DE REIS.  El final de etapa ha sido más llevadero. Hemos circulado entre las sombras de las parras de Alvariño, que han proporcionado una buena sombra  que nos ha venido muy bien a esta altura de la etapa.

Tras la ducha, toca lavar la ropa, cenar y  descansar. Etapa pesada. Lo hemos pasado mal.  Habíamos previsto hacer 80 kilómetros pero no ha sido posible, nos hemos quedado en 60 kilómetros.

Kilómetros recorridos: 59,5

Duración total de la etapa con descansos: 10h:14´              

Tiempo en bicicleta: 04h: 39´      Velocidad media:         12,8 km/h